PREGUNTA. ―Consciencia es un término con el que tengo muchos problemas, y siempre los he tenido. Lo veo como la capacidad de estar alerta, pero, aun así, la expresión no me parece exacta. Es un término elusivo.
RESPUESTA. ¡Ciertamente, la consciencia es elusiva!
PREGUNTA. ―No sé como expresarlo, pero creo que pienso en ella como un estado de “alerta”, en el sentido general del término.
RESPUESTA. En estas enseñanzas, el término Consciencia suele usarse con “C” mayúscula para indicar que es sinónimo de términos como Dios, Fuente, Totalidad, Unidad, Tao, etc. Es aquello que es la fuente y sustancia de todo lo físico, de todo fenómeno que forma parte de esta manifestación. Vino de alguna parte, y tal como la araña teje su tela a partir de sí misma, la Consciencia teje esta manifestación fenoménica de sí misma. Ahora bien, el aspecto en que esta analogía concreta pierde validez radica en que la tela de la Consciencia no es en ningún momento ni lugar independiente de la propia Consciencia. La manifestación (todo esto, todos nosotros, todas las cosas) no está desconectada de esa fuente original. De modo que la Consciencia es tanto el animus como el corpus, la sustancia y lo que la anima.
PREGUNTA. ―De acuerdo. Mi problema es: Entonces ¿qué está detrás de eso?
RESPUESTA. Claro. Es una pregunta absolutamente legítima. Porque cuando objetivamos la Consciencia, convirtiéndola en una cosa, el siguiente paso lógico es: “De acuerdo, ¿en qué campo existe esa cosa?“; pero estamos limitados por el lenguaje, y el lenguaje, por su propia estructura, expresa una relación sujeto-objeto. Cada frase tiene un sujeto y habla de un objeto. Cuando pensamos en algo, cuando pronunciamos la primera palabra sobre algo, lo objetivamos. Cuando Lao Tse escribió el Tao Te Ching, su primera línea fue: “El Tao que puede nombrarse no es el verdadero Tao”. En cuanto hablas de él, en cuanto tienes un concepto mental (no tienes que articularlo), en cuanto la imagen se forma en tu mente, eso ha quedado objetivado. De modo que en cuanto empezamos a hablar de ello, deja de ser Ello. Todos estos conceptos no son Ello. Simplemente son indicadores, y es de esperar que apunten de manera general en la dirección de Ello. La frase que sirve de piedra angular es: “Todo lo que hay es Consciencia”. Pero ni siquiera esta frase acierta completamente.
Wayne Liquorman