- Concentración del intelecto en un punto focal. Es como prenderle fuego a un combustible seco. Cuando la madera mojada se ha secado al calor del fuego, las llamas se encienden vivamente. De modo similar cuando nuestra mente es liberada de la niebla y humedad de los deseos y las pasiones por la fuerza de la contemplación de lo Divino, (kamana, vasana) se vuelve ligera. Se trata de una condición de pureza mental que induce en ciertos casos a un estado de silencioso emerger a un humor particular o a un exceso de emoción y agitación más allá de la capacidad de control de uno. Todos estos humores se expanden desde una suprema existencia en direcciones especiales.
- Concentración de nuestros poderes emocionales. Induce a un estado de cuerpo inerte, de absorción en un sentimiento sagrado que sale de un solo estado supramental indivisible. A ese nivel el cuerpo puede ser comparado con un carbón quemado que tenga el fuego aparentemente extinguido. En este estado el devoto se pasa las horas en condición de inmovilidad exterior; pero en las entrañas de su corazón se agita una corriente incesante de sublime emoción. Cuando este estado madura, el sentimiento atrae fuertes poderes del Alma-Universal, e igual que una vasija rebosa cuando se vierte demasiada agua en su interior, éste se extiende por el ancho mundo en una enorme extensión bajo la intensa presión de su expansividad.
- Fusión de la vida interior y exterior. Este estado es exactamente igual al de un carbón encendido. El fuego impregna cada átomo de las cubiertas internas y externas – todas están radiantes de una sola Luz divina. El devoto vive, se mueve y tiene su ser en un océano gozoso de Luz.
- Plena concentración, en la que el devoto pierde toda conciencia de dualidad – del funcionamiento de los tres gunas. Es como el estado de un carbón reducido a cenizas. No hay distinción entre lo interior y lo exterior, entre aquí y allá; es un estado de absorción en lo Supremo, de Total Unidad. Las vibraciones de pensamiento, sentimiento o voluntad se desvanecen por completo. Se asemeja a la tranquilidad perfecta de un lago que duerme bajo un cielo azul.
Sri Anandamayi Ma