Calendario de Sabiduría……….. 7 de Febrero

Perfeccionar el yo es una tarea tanto interior como exterior. Es imposible mejorar sin comunicarse con los demás, influirles y recibir su influencia.

 

 

Tres tentaciones atormentan a la gente: el deseo sexual, el orgullo y el ansia de riquezas. Todas las desgracias de la humanidad se derivan de estos tres deseos. Sin ellos, la gente viviría feliz. ¿Cómo podemos desembarazarnos de estas terribles enfermedades? Empieza por ti y perfecciónate: ésta es la respuesta. El perfeccionamiento del mundo empieza por uno mismo. E Robert de Lamennais.

 
«Sed perfectos, como vuestro Padre celestial», dijo Cristo. Esto no significa que Cristo pidiera a la gente que fuera tan buena como Dios, sino que cada uno ha de esforzarse por alcanzar la perfección.

 
La perfección pura sólo puede encontrarse en Dios. El objetivo de la vida es acercarse más a Dios. Y cuando una persona sabe lo que es bueno y lo que es malo, se acerca más al bien y se aleja más del mal. Confucio.

 
No hay nada más dañino para ti que perfeccionar sólo el lado animal, material, de tu vida. No hay nada más beneficioso, tanto para ti como para los demás, que la actividad dirigida al perfeccionamiento de tu alma.

León Tolstoi

INCONDICIONAL

En cuanto sabéis qué es el amor, estáis listos para dar; porque sabéis que cuanto más dais, más tenéis. Cuanto más le ofrezcáis a los demás, más irá surgiendo en vuestro ser.

El amor jamás se molesta mucho en pensar si el otro es o no merecedor de recibir. Esas son cosas mezquinas, actitudes mezquinas. El amor jamás es mísero.
La nube jamás se molesta en meditar si la tierra es merecedora de recibir su don. Llueve sobre las montañas, llueve sobre las rocas, llueve por doquier. Da sin poner ninguna condición, sin ataduras.
Y así es el amor: simplemente da, disfruta dando. Quienquiera que esté dispuesto a recibir, recibe. No necesita merecerlo, no necesita estar en una categoría especial, no necesita cumplir ningún requisito. Si todas estas cosas fueran necesarias, entonces lo que dais no es amor. Debe de ser otra cosa y aún desconocéis qué es el amor. En cuanto sabéis qué es el amor, estáis listos para dar; porque sabéis que cuanto más dais, más tenéis. Cuanto más le ofrezcáis a los demás, más irá surgiendo en vuestro ser.
La economía corriente es totalmente diferente: si dais algo, lo perdéis. Si queréis tenerlo, evitad darlo. Recogedlo, sed mezquinos. Es el caso opuesto que con el amor: si queréis tenerlo, no seáis tacaños; de lo contrario, estará muerto, se estancará; apestará, morirá. Seguid dando, y se os manifestarán fuentes nuevas, corrientes frescas fluirán a vuestro ser. Cuando vuestro acto de dar es incondicional, total, la totalidad de la existencia empieza a entrar en vosotros.

Osho

Por favor puntúa este artículo