si dejas de querer capturar y te haces permeable a lo que la vida te quiere ofrecer, si te relajas, si te sientas sin pedirle nada al momento, sin esperar el siguiente, sin esperar obtener algo. si dejas de esperar la iluminación, el amor, la paz, una mente tranquila o una lengua sobre tu labio y dejas de pedirte nada, lo sagrado surgiría sin más. si no tuvieras ningún futuro que ponerte, ningún pasado que quitarte, si estuvieras desnudo en este momento, sintiéndolo pleno, sin ningún velo temporal que esconda tu vulnerabilidad, muriendo a todo, con el corazón presente, con el corazón amante. si estuvieras sin una cascara de espera, sin el tope del mañana, desvestido de expectativas, miedos, disolviéndote en este espacio abierto, entregándote por completo, desprotegido, en pelotas, sin sujetarte a nada
si te relajaras en el corazón de cada instante, si permanecieras completamente abierto, sin desechar nada, si tu corazón se abriera con cada presencia, si dejaras de esperar que algún día las cosas fueran diferentes, si no cambiaras de opción para agradar a nadie, si no te traicionaras para pertenecer, para ser parte, si fueras honesto contigo, si tiraras todo lo que no es original en ti. si experimentaras todo con un corazón desprotegido. si fueras mas allá del nudo de tus pequeños problemas, si fueras capaz de dejar morir lo que es capaz de morir, si te desnudaras de proyecciones, condicionamientos y conceptos, si desconectaras esa tendencia a salir fuera de ti. si te rindes, si te respetas, si no juzgas y eres responsable. si reconoces las maravillas que hay en ti. si en todo momento tu corazón se mantuviera abierto, vulnerable, vivo, expresivo, tierno, intrépido, desprotegido, mas allá de sentirte herido, ponerte enfermo, tener buenos o malos días, y si todo ello ocurriera con un corazón entero
si te permitieras atravesar tus propios miedos, tu apego a la seguridad. si tuvieras el coraje de soltar tus identidades de mierda, si no te aferraras a ti mismo, si entregaras tus certezas, tus creencias y entraras en el misterio que está mas allá de tu pequeña celda de importancia autoprotectora, cada momento surgiría mas desnudo, vulnerable y vivo
si descansaras en eso que siempre has estado buscando y a lo que te has intentado aproximar, mediante la violencia a ti, el yoga, la meditación, la lectura o el orgasmo ritual. si no tuvieras ya la necesidad de ganar nada ni a nadie, tu vientre se suavizaría y tu cuerpo se relajaría. sin armaduras, sin luchas, serias la irradiación desnuda del tiempo viviente, la fuerza misteriosa del amor libre, surgiendo como mujer o hombre disolviéndote en union contigo en el breve drama de tu vida
si dejaras de hacer, si dejaras ir esa inútil y compulsiva necesidad de hacer. si te dieras cuenta que todo lo que estás haciendo, no es nada más que una manera de no permitir que todo sea como es, que siempre y cuando no permitas que todo sea como es, será complicado salir de la trampa de está conciencia neurótica
si simplemente te atrevieras a reclamar la belleza y el poder que hay en ti, si dejaras de excusarte en tu pereza, si dejaras de pedir perdón por ser quien eres y dejaras de culpar a otros por aquello en lo que te has convertido. si dieras tu don si retener nada, si te suavizaras, si permites, si no te guardaras, si te regalas, si te ofrecieras. si vivieras tu verdad mas profunda, si vivieras desde ese corazón impulsor, si abandonaras el fingimiento y fueras fiel a tu instinto, si no tapases tu putrefacción con flores, si dejaras de posponer y simular indiferencia. si te lanzaras en la dirección presentida como justa,
si no te mintieras, si te hicieras ese regalo, si no te mintieras