El yo (ego) no es más que una ilusión de ti mismo. Se hace poseedor de tu forma de pensar, de sentir e incluso de tus hábitos comunes y por esto a uno le cuesta darse cuenta que lo está dominando. El ego se mimetiza, es como una máscara que se te impone y ya no te das cuenta que la llevas puesta pero ella te conduce a reacciones diarias según las directrices de ese yo.
Este vídeo nos muestra un poco el alcance del yo en la vida de cada uno de nos.