Todas las religiones del mundo están constituidas por tres elementos, que ordenados de acuerdo a su importancia son: Principios, Mitología y Ceremonias.
1.° Los Principios fundamentales de cualquier religión se pueden resumir en uno solo: Unir al hombre con Dios (re-ligere, en latín: reunir). Siendo además un factor común a todas las religiones del mundo, naturalmente no por coincidencia. Este principio básico es el Conocimiento Unitivo, la experiencia directa de Dios que es revelada por el Maestro Perfecto vivo de la época, y aquí es donde aparece el segundo estrato.
2.° La Mitología la constituyen todos los relatos, historias y leyendas que describen o tratan de describir la gloria del Maestro que reveló aquel Principio a los hombres que se acercaron a El con humildad y le reconocieron. A pesar de que estos relatos posiblemente son experiencias verídicas que tuvieron aquellos iniciados, con el tiempo, después que el Maestro los deje, desapareciendo con Él la Fuente de la experiencia, sólo quedan sus discípulos, y cuando éstos desaparecen, tan sólo quedan los seguidores no iniciados y las escrituras, lo cual degenera inevitablemente, convirtiéndose en un Mito.
3.° Las Ceremonias son, al igual que la Mitología, los residuos ya vacíos de algo que en su día tuvo un contenido. Pues los discípulos a quienes les fue revelada esa experiencia interior y experimentaron sus beneficios, mostraron su agradecimiento al Maestro en formas de acuerdo a su cultura, sus creencias y la tradición de esa época, y esto daba origen a una serie de ceremonias que fue lo único que pudieron heredar aquellos neófitos no iniciados, los cuales imitaban las ceremonias apoyándose al tiempo en las enseñanzas legadas en las escrituras que, al carecer de la experiencia de la Gracia del Maestro ya desaparecido, se convertían en pura moral dogmática que les decía lo que se debe hacer y lo que no, incapaz de hacerles transcender esa dualidad, ni de elevar sus conciencias hasta unirlas con el Uno.
Y desgraciadamente, esto es todo lo que queda hoy en las llamadas religiones: Mitología y Ceremonias. Si no está el Maestro que revele el Principio Universal que han revelado todos los Maestros de la antigüedad y de donde han surgido todas las religiones; están vacías y no cumplen su propósito.
Todos los Maestros han dicho lo mismo, aunque quizá con palabras diferentes: sólo a través del Conocimiento interior de Dios, se puede alcanzar la liberación, el Reino de los Cielos, la Morada de Brahman, el Nirvana, o como se le quiera llamar. Las Escrituras tan sólo cumplen el papel de señales indicatorias.
Respecto de este Conocimiento inefable hay cantidad de referencias:
«En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios.» S. Juan 1:1
«En el principio estaba el Creador, y con él estaba la Palabra, y la Palabra era el Supremo Dios.» Vedas
«La meditación en el Nombre o Sonido Primordial, es el camino real hacia la salvación.» Upanishads
«Así os revelo la Palabra que el más sabio me ha enseñado, la Palabra que es lo mejor que los mortales pueden escuchar. Quien me rinda obediencia y fije su atención en Mí, obtendrá al Ser Omnipresente y logrará la inmortalidad: realizará a Dios.» Zaratustra
«El Tao que puede expresarse no es el verdadero Tao. El Tao que puede nombrarse no es el Tao eterno.» Tao Te King
«El nombre de Dios es Jehová.» (Jehová etimológicamente en hebreo, significa impronunciable.) Antiguo Testamento
«Es recordando tu Nombre como yo debo vivir y morir.» Mahoma
«El centro místico primordial es la oculta Luz interior, de una pureza, efulgencia y sutileza tal, que está más allá de la comprensión.» El libro Zohar del Esplendor