Aquellos que pensaron en las redes sociales como comunidades no supieron ver más allá. No compartimos nada los unos con los otros, clasificamos la información como buena o mala según nuestro punto de vista y se la reenviamos a otros, ¿donde está aquí la comunidad?. Normalmente no hay nada tuyo propio que no sea la foto con tu perro el miércoles por la noche o la hija de tu hermana el sábado a la hora de comer.