Las compañías de alquiler de coches en Japón descubrieron algo extraño recientemente. Muchos de sus clientes alquilaban un vehículo durante horas pero el kilometraje no subía. Aparentemente no lo movían de su sitio. Dos de estas empresas decidieron averiguar qué estaba pasando.
Orix y Times24 son dos de las agencias de alquiler de coches por horas que más han detectado este extraño proceder. Ambas decidieron tomar el camino más fácil y preguntaron directamente a los clientes que no hacían kilometraje qué hacen exactamente con el coche si no lo mueven de su sitio. Las respuestas son sorprendentes y dan mucho que pensar sobre la sociedad en la que vivimos y cómo usamos el espacio.
Según ambas agencias relataron al diario japonés The Asahi Shimbun, los clientes usan los automóviles alquilados como una especie de extensión remota de su domicilio u oficina. A veces los usan para trabajar unas horas. Otras para guardar las compras que van haciendo en el maletero como si fuera una vulgar taquilla. Algunos clientes alquilan un coche durante una hora para almorzar tranquilos o para echarse una siesta, y lo peor es que tiene sentido en las concurridas ciudades japonesas. “Usé el coche para comer el almuerzo que había comprado cerca porque no había ningún otro sitio donde sentarme”, reconoce un cliente de la prefectura de Saitama, en Tokio.
“Normalmente uso el un cibercafé para echarme una siesta entre mis reuniones con clientes, pero alquilar un coche cuesta más o menos lo mismo”, explica otro de los habituales que alquilan sin hacer kilómetros. Durante emergencias como el terremoto de 2011, los clientes reconocieron que alquilaban los coches para cargar el móvil o el laptop durante los fallos de la red eléctrica. Entre los usos mas exóticos están los que alquilan el espacio del coche para ponerse un disfraz antes de una fiesta, para practicar sus artes en el rap o para ver la televisión un rato.
Los coches de alquiler por horas no son especialmente caros. Los hay en los principales estacionamientos y cuestan en torno a los 8 dólares la hora. Se calcula que en Japón hay alrededor de 12.000 puntos de alquiler de estos vehículos. De momento ninguna de las compañías de alquiler ha reaccionado a esta nueva tendencia. En cierto modo salen ganando con ello porque no hay desgaste del motor ni riesgo alguno de accidente a menos que se les caiga el almuerzo en la tapicería.